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Seguía caminando noche tras noche, recordando todos los momento vividos a tú lado, sabía que podría confiar en ti que siempre estarías cuando te necesitara aunque, ahora, estuvieras tan lejos de mí, en ti guarde mis secretos, a ti te necesitaba a mi lado, en este momento te estado necesitando pero tú ya no tienes tiempo para mí.
El no poder contar contigo me hace sentir mal y un fuerte dolor en el pecho apareció, ahora es cuando más te necesitaba y ahora es cuando nada he recibido, todo se acaba, solo éramos amigos cuando estabas lejos de tu casa, solo éramos amigos cuando estabas sola, ahora ya no te acuerdas de nada y me doy cuenta de que no podía confiar en ti que solo creía que podía hacerlo, pero me equivoque, pues mis secretos cuentas a tus nuevos amigos, secretos que solo tú conoces a ti no te importan pero el dolor sigue en mi pecho mientras tú lo apuñalas una y otra vez sin que eso te importe.
Me sentí mal, pero ahora estoy mejor que nunca, creía que te necesitaba pero no, no te necesito, el dolor que sentía en mi pecho era el saber que ya no te importaba y ahora visto lo que eres capaz de hacer, ya no me importa y el dolor que sentía en el pecho ha desaparecido.
Es algo duro que nos traicione alguien en quien tanto confiamos pero al menos algo de todo esto he aprendido y os digo que hasta la persona en la que más confiáis os traicionará de una forma u otra y es que a veces sentimos la necesidad de tener a alguien a nuestro lado, alguien que nos apoye y nos anime, confiamos en esa persona y le abrimos nuestro corazón, para que cuando nos demos la vuelta nos lo pisoteen, nos olvidamos pero vuelve a venir alguien y volvemos a repetir la misma historia una y otra vez.
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